Re: Marruecos 2015, la tenía pendiente.
Publicado: 09 Feb 2017 14:56
Día 3 Migladem Erfoud, 18 de octubre.
El amanecer nos despertó y pudimos recordar donde estabamos, la verdad es que nos acostamos tan cansados que dormimos como marmotas, también hay que decir que nuestro compañero Juanfran es un máquina preparando la tienda, y le dá al colchón hinchable un punto que no añoras el de casa.
Yo personalmente llevo mi almoada, que para eso soy algo especial, lo aconsejé a mis compañeros de tienda, Fernando y Juanfran creo que agradecieron el consejo.
De las tres noches de acampada esta fué en la única que el suelo no era arena de duna, por tanto se supone que la mas incómoda, pero no, dormimos de maravilla.
Con las primeras luces del alba nos levantamos con mucha curiosidad para ver como era el poblado donde habíamos dormido, la verdad es que el sitio seguía siendo siniestro aún de día.
Tenía una estructura muy simple, casas todas iguales de planta y superficie, todas con una habitación de entrada, una pequeña cocina con horno de leña incluido y dos dormitorios minúsculos, donde supongo que no pondrían cama sino cojines y esterillas. Solo una o dos de las viviendas mantenía el techo en pié, una de ellas evidentemente era la usada por nuestro merodeador nocturno.
El poblado estaba en una llanura en una de las márgenes del cañón, bajando unas escaleras interminables hechas de obra abajo y talladas en la roca en su coronación se podía acceder a la zona de las minas y las viviendas supongo que de los ingenieros y jefes de las instalaciones, que estaban mas abajo.
Aqui comenzaban las escaleras...
Aquí terminaban, justo al lado de los edificios que se ven al fondo en la foto del comienzo de las escaleras....
Todas las casas daban a calles que cruzaban todas perpendicularmente, así la estructura del poblado era muy organizado y todo al rededor de una Mezquita, como no podía ser de otra manera.
y una de las perpendiculares
Separado del poblado había unas instalaciones que parecían corrales y quizás unas cocinas algo mas dotadas que parecían se comunitarias, pero no terminamos de descubrir su finalidad.
Visitamos el poblado y avivamos el fuego para prepararnos el desayuno, recoger y continuar el viaje.
Una vez repostados cogimos los coches y nos dispusimos a disfrutar de los paisajes que tenía el cañon y que no pudimos ver al llegar de noche.
En la zona de las minas, donde termina la escalera hicimos una breve parada para ver las instalaciones y sacar algunas fotos.
http://i1226.photobucket.com/albums/ee4 ... rnnvyk.jpg" onclick="window.open(this.href);return false;
Había un puente que cruzaba, daba un poco de yuyu, pero yo metí algo el coche.
Al salir se me quedó una rueda en el aire hacia el río, que sustillo, casi hago la aberronchada definitiva
Seguimos bajando y saliendo del Attlas dirección sur, un rato de carretera hasta er Rachidia.
Justo antes de er Rachidia hay un embalse cuyas vistas son presciosas,
Pasar por er rachidia sin parar en sus puestos a comer es poco menos que pecado, mas que recomendables los pinchos y quefta de corderos hchos allí sobre la marcha de los trozos de carne que tienen colgando en los puestos, pero la verdad es que era muy temprano y acababamos de salir.
Saliendo de Er Rachidia le decimos adiós al atlas y a las carreteras , por fin, menos mal que estos coches andan y el que va primero puede avisar si viene alguien por la emisora para adelantar, porque los puertos de montaña, como te toque un camión de estos atiborrado y quemadísimo te mueres de desesperación.
(hago una breve parada para comer y continúo la crónica de hoy, queda sin duda lo mejor jejejejeje)
El amanecer nos despertó y pudimos recordar donde estabamos, la verdad es que nos acostamos tan cansados que dormimos como marmotas, también hay que decir que nuestro compañero Juanfran es un máquina preparando la tienda, y le dá al colchón hinchable un punto que no añoras el de casa.
Yo personalmente llevo mi almoada, que para eso soy algo especial, lo aconsejé a mis compañeros de tienda, Fernando y Juanfran creo que agradecieron el consejo.
De las tres noches de acampada esta fué en la única que el suelo no era arena de duna, por tanto se supone que la mas incómoda, pero no, dormimos de maravilla.
Con las primeras luces del alba nos levantamos con mucha curiosidad para ver como era el poblado donde habíamos dormido, la verdad es que el sitio seguía siendo siniestro aún de día.
Tenía una estructura muy simple, casas todas iguales de planta y superficie, todas con una habitación de entrada, una pequeña cocina con horno de leña incluido y dos dormitorios minúsculos, donde supongo que no pondrían cama sino cojines y esterillas. Solo una o dos de las viviendas mantenía el techo en pié, una de ellas evidentemente era la usada por nuestro merodeador nocturno.
El poblado estaba en una llanura en una de las márgenes del cañón, bajando unas escaleras interminables hechas de obra abajo y talladas en la roca en su coronación se podía acceder a la zona de las minas y las viviendas supongo que de los ingenieros y jefes de las instalaciones, que estaban mas abajo.
Aqui comenzaban las escaleras...
Aquí terminaban, justo al lado de los edificios que se ven al fondo en la foto del comienzo de las escaleras....
Todas las casas daban a calles que cruzaban todas perpendicularmente, así la estructura del poblado era muy organizado y todo al rededor de una Mezquita, como no podía ser de otra manera.
y una de las perpendiculares
Separado del poblado había unas instalaciones que parecían corrales y quizás unas cocinas algo mas dotadas que parecían se comunitarias, pero no terminamos de descubrir su finalidad.
Visitamos el poblado y avivamos el fuego para prepararnos el desayuno, recoger y continuar el viaje.
Una vez repostados cogimos los coches y nos dispusimos a disfrutar de los paisajes que tenía el cañon y que no pudimos ver al llegar de noche.
En la zona de las minas, donde termina la escalera hicimos una breve parada para ver las instalaciones y sacar algunas fotos.
http://i1226.photobucket.com/albums/ee4 ... rnnvyk.jpg" onclick="window.open(this.href);return false;
Había un puente que cruzaba, daba un poco de yuyu, pero yo metí algo el coche.
Al salir se me quedó una rueda en el aire hacia el río, que sustillo, casi hago la aberronchada definitiva
Seguimos bajando y saliendo del Attlas dirección sur, un rato de carretera hasta er Rachidia.
Justo antes de er Rachidia hay un embalse cuyas vistas son presciosas,
Pasar por er rachidia sin parar en sus puestos a comer es poco menos que pecado, mas que recomendables los pinchos y quefta de corderos hchos allí sobre la marcha de los trozos de carne que tienen colgando en los puestos, pero la verdad es que era muy temprano y acababamos de salir.
Saliendo de Er Rachidia le decimos adiós al atlas y a las carreteras , por fin, menos mal que estos coches andan y el que va primero puede avisar si viene alguien por la emisora para adelantar, porque los puertos de montaña, como te toque un camión de estos atiborrado y quemadísimo te mueres de desesperación.
(hago una breve parada para comer y continúo la crónica de hoy, queda sin duda lo mejor jejejejeje)